domingo, 19 de mayo de 2019

OSCURO SALÓN

Una vez más el bolígrafo se deja llevar, la tinta fluye como el mar, oscurece todo un cristal, el papel de dejarse llevar, observar y esperar, mientras mis manos se unen con el latiente, haciendo que el corazón se desaliente, mientras el alma siente, el pensamiento inerte me dejó sin creyente, quiero fundirme y volar, escribir y dejar de añorar, escribir y curar, mirar al barco como echa las velas para zarpar, ser consciente de que ya no hay vuelta atrás, no hay nada más, estoy cansado de todas mis barras, ya no digo ni una palabra, no hay fuego ni acción, se oscureció, y no volvió a salir el sol, todo lo absorbió la oscuridad, no hay punto de partida ni final, tan solo un día más, una noche que no se acaba, una tormenta en mí cama, un calvario que no cesa, una solución que no se da, una cortina que tapa, una vaga desgana que abarca tanta marca que no se deshace y alienta todo lo que deshila la coyuntura que creció y no curó, nada sano salió del corazón, todo se vuelve malo y desagradecido para quien lo dio todo y se quedó perdido, no recuerda lo que era, como pájaro que no vuela, como fuego que no quema, así quedó, así queda toda mi luna llena..