Una vez más nos volvemos a encontrar, tú y yo, soledad.
Y como ya es costumbre no estás sola, estás unida al abismo.
De nuevo comienzo desde abajo, intentando no tropezar, cicatrizando y apenando a mi pesar.
Comienzo a pensar que esto nunca acabará, que me encuentro en una espiral, en la cual nunca veo el final.
Soy algo masoca la verdad, ya que siempre intento creyendo lo mejor para después tropezar y reencontrarme con la verdadera realidad.
Una realidad que ya más que asustar, aburre. Estoy tan acostumbrado que pienso que camina conmigo de la mano.
¿Realmente existe lo que busco o me remito a buscar algo que nunca podré encontrar?
Es algo irónico y estúpido ya que por mucho que me haga mil preguntas seguiré siendo igual.
Caminando por las bonitas curvas de la vida, sonriendo a la inmensa mar, sorprendiéndome al mejorar y descubriendo, lo que es amar.
Y como ya es costumbre no estás sola, estás unida al abismo.
De nuevo comienzo desde abajo, intentando no tropezar, cicatrizando y apenando a mi pesar.
Comienzo a pensar que esto nunca acabará, que me encuentro en una espiral, en la cual nunca veo el final.
Soy algo masoca la verdad, ya que siempre intento creyendo lo mejor para después tropezar y reencontrarme con la verdadera realidad.
Una realidad que ya más que asustar, aburre. Estoy tan acostumbrado que pienso que camina conmigo de la mano.
¿Realmente existe lo que busco o me remito a buscar algo que nunca podré encontrar?
Es algo irónico y estúpido ya que por mucho que me haga mil preguntas seguiré siendo igual.
Caminando por las bonitas curvas de la vida, sonriendo a la inmensa mar, sorprendiéndome al mejorar y descubriendo, lo que es amar.
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